El Almacén de la Catedral, situado en la capital del Pirineo Aragonés, Jaca, está inspirado en los antiguos colmados. En este acogedor espacio se pueden degustar las mejores materias primas trabajadas de forma tradicional.
La calidad, frescura y la sencillez son los ingredientes principales, en una cocina honesta con tradición. El Almacén nos transporta a las antiguas despensas y en su cocina se organiza toda una oda al producto nacional.

Un restaurante concebido para el disfrute de los sentidos en donde lo tradicional y lo innovador se funden en perfecta armonía. Dispone de una amplia terraza, abierta durante todo el año, nos invita a degustar relajadamente su carta con vistas a la Catedral.

Su oferta gastronómica está bajo la dirección de Alejandro Enériz, cocinero aragonés que cuenta con 8 años de experiencia en cocinas de alto nivel con estrella Michelín como Akelarre, Donosti, o lo que fue en su momento Bal d’Onsera, Zaragoza.

La dirección del restaurante la gestiona Luca Chirizzi, un Italiano enamorado de España que pese a iniciarse como abogado se sumergió de lleno en el mundo de la hostelería llegando a ser Jefe de la barra central del Club Gibó, premiado como mejor club de Italia, un lugar de cuento de hadas suspendido entre las rocas del cabo Santa Maria di Leuca.

Tras una larga relación y un sueño compartido, deciden emprender este negocio, además del restaurante El Rincón de la Catedral ubicado también en la localidad de Jaca, a escasos metros de este, en el que cada uno disfruta su talento en el mejor entorno y con la mejor compañía.

El Almacén de la Catedral engloba las características perfectas para ofrecer una experiencia diferenciadora en un ambiente divertido.

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